Posible casa Colombo, de la cual estamos averiguando su autoría
Foto: Ana di Cesare y Margarita Paroli- Peña de Historia del Sur
Investigación Caro Colombo
Foto: Ana di Cesare y Margarita Paroli- Peña de Historia del Sur
Investigación Caro Colombo
La única seguridad para
un historiador es la incertidumbre.
Ayer, un joven profesor de historia, insistía en informarme que no siempre se encuentran los datos.
Yo lo miraba con la ternura que siente un viejo zorro por un cachorro. A la séptima u octava vez que lo repitió, le respondí, que esa es nuestra castración como historiadores. Vi una chispazo de alegría en su mirada. Sabemos los investigadores, que vamos a llegar a un punto ciego, una pared en la que no habrá el menor orificio para fisgonear y, que será imposible demoler.
Lamentablemente, para alguien que comienza a investigar, poner la imposibilidad antes que la acción, amerita un mal diagnóstico.
Como llevo tantos
años de oficio, desde que era una chica de 18 añitos y opté por anotarme en un
seminario en la facultad, (la cátedra que la dictaba me eligió de entre muchos
y me enseñó a trabajar), no me asustan las dificultades, la aparente ausencia
de documentación, los obligados saltos del charco, las trampas de los coleccionistas privados. Oficio es oficio y con los años se descubre que los ases
salen de la manga, sin trampas.
Todos los
historiadores sabemos, además de los límites, que tarde o temprano, aquellos que historiamos salen a
nuestro encuentro.
Tengo una enorme
confianza en los hilos subalternos de esta investigación, que se presenta, a primera vista como un alto muro.
Nosotras: serenas, muy optimistas. Hemos descubierto
varias tramas y sub tramas, lo que aparentaba ser un trabajo en una dirección,
es hoy un viaje por muchos puertos, una casa con muchas entradas, con
cerraduras secretas que parecen desear ser abiertas.
Eso es lo mejor de
todo, cuando una pista reclama otra se forma la cadena y una queda con la boca
abierta. ¿Pero, si estamos investigamos a Colombo, porqué estamos aquí con….?
Destinos cruzados, nada es lineal. El tiempo y los destinos con sus volteretas.
Recuerdo a mi padre contándome una historia que involucraba a Soiza Reilly, a Claudio de Alas y a alguien más. Recuerdo los datos, la anécdota, el final... Situaciones de otros tiempos, de otros anhelos, de otras influencias, donde se tocaba lo artístico con fracturas personales y estados de confusión. Generaciones hijas de temblores sociales, de efervescencias culturales.
Esa charla, de hace décadas, afloró ayer a mi memoria, se resignificó. Se hizo presente como una posibilidad de entendimiento.
Una posibilidad, eso, una posibilidad de entre las decenas distribuídas sobre nuestra mesa de trabajo.
Ayer fue un día muy
particular. Cafés, restaurantes, más cafés, entrevistas, lecturas, documentos,
hallazgos, conexiones, risas. Fue una buena jornada, reímos muchísimo, tejimos con hilachas de vidas pasadas, composiciones posibles.
Día de cosecha
extraña.
Publicado 11/9/2013 - 8.04 Hs. de Argentina
© Ana di Cesare y Margarita Paroli, para Peña de Historia del Sur. Investigación Caro Colombo. Sobre momento histórico, vida y obra del Arquitecto Virginio Colombo. Queda prohibida la producción total o parcial de la información que subimos a internet, sin la autorización por escrito de ambas autoras. Nuestra investigación se encuentra protegiada por los derechos de autor.
Publicado 11/9/2013 - 8.04 Hs. de Argentina
© Ana di Cesare y Margarita Paroli, para Peña de Historia del Sur. Investigación Caro Colombo. Sobre momento histórico, vida y obra del Arquitecto Virginio Colombo. Queda prohibida la producción total o parcial de la información que subimos a internet, sin la autorización por escrito de ambas autoras. Nuestra investigación se encuentra protegiada por los derechos de autor.